KAIRÓS, REVISTA DE
CIENCIAS ECONÓMICAS, JURÍDICAS Y ADMINISTRATIVAS
KAIRÓS, REVISTA DE
CIENCIAS ECONÓMICAS, JURÍDICAS Y ADMINISTRATIVAS
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FACULTAD DE
CIENCIAS POLÍTICAS Y ADMINISTRATIVAS
Revista Kairós, Vol. (3) No. 4, pp. 16-26, Enero - Junio 2020, Universidad Nacional de Chimborazo, Riobamba-Ecuador - ISSN No. 2631-2743
http://kairos.unach.edu.ec
Revista Kairós, Vol. (3) No. 4, pp. 16-26, Enero - Junio 2020, Universidad Nacional de Chimborazo, Riobamba-Ecuador - ISSN No. 2631-2743
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FACULTAD DE
CIENCIAS POLÍTICAS Y ADMINISTRATIVAS
otros festivales. (Redondo, 2015:626)
Pero los festivales en sí tienen otras connotaciones.
Pueden ser entendidos como un elemento discursivo
en sí mismos, pues tratan de dar a conocer un punto de
vista acerca de cómo cierto sector entiende lo que es el
cine, esto a través de la programación concebida como
“una estructura dotada de cierta complejidad. En su
conformación intervienen elementos tales como los
criterios de selección, las secciones (ociales, paralelas,
retrospectivas), los homenajes, las personalidades
invitadas de especial relevancia o los premios” (Redondo,
2015:623).
Las proyecciones en los festivales determinan qué
películas son distribuidas en distintos espacios
culturales y, por lo tanto, a qué películas pueden
tener acceso críticos y académicos. Esta última
cuestión no es en absoluto desdeñable. Dado
que la mayoría de películas no occidentales con
las que las audiencias occidentales pueden estar
familiarizadas han aparecido en el programa de los
festivales, los investigadores tienden a aproximarse
a ellas como una invocación nostálgica de los
momentos en que las industrias no occidentales
fueron «descubiertas» –es decir, descubiertas por
los occidentales– en las principales competiciones
internacionales (Stringer, 2001, p. 134-135).
La permanencia de un festival depende de varios factores,
entre los cuales están aquellas estrategias que se puedan
hacer con otros festivales, el seguimiento del público y la
relación con los productores y directores cinematográcos,
con lo cual los pequeños festivales pueden permanecer
en el tiempo. A ello se le debe sumar criterios de calidad
que realcen su dimensión como plataformas alternativas
de difusión del cine. En este campo se encuentra el
Kunturñawi.
En el ámbito académico, se utilizaron varias teorías
y análisis para su abordaje, uno de los primeros que
surgió es el que denía a los festivales de cine desde su
concepto de atractor, “desarrollado por la teoría del caos
en el campo de la física. La capacidad de atraer distintos
recursos (celebridades, prensa, público)” (Vallejo, 2012,
p. 21). A través de este modelo se pretende analizar de
manera universal los mecanismos de funcionamiento de
los festivales, y para ello utiliza cuatro características con
la forma de gestionar recursos del entorno: importación
de energía, transformación de la energía, exportación
de la energía y el ciclo de operación (la re-energización
del entorno), esto quiere decir cómo se administran los
recursos que llegan al festival, los tranforma en algo nuevo
y los exporta a su vez para renovar el entorno para la
siguiente edición (Fischer, 2009).
Existe otro modelo de análisis, que hace foco en la
circulación y maniesta que a la vez que es importante
analizarlos en sus características propias, es necesario
analizarlos de manera global, como un sistema
interconectado. De Valck menciona que se los debe
considerar como nodos:
Considero que los festivales de cine pueden
ser entendidos como sitios de paso obligatorio,
porque son eventos –actores– que han cobrado
tanta relevancia en la producción, distribución
y consumo de muchas películas que, sin ellos,
se derrumbaría una red completa de prácticas,
lugares, personas, etc. Estos actores son de vital
importancia y constituyen paradas fundamentales
para los ujos de la red. (De Valck, 2007, p. 36)
Otras características que suma De Valck es la dimensión
experiencial con rituales que se representan y se
reproducen en cada entorno, por ejemplo, las alfombras
rojas, o la entrega de premios (De Valck, 2007, p. 37).
Un último modelo, trabaja con la idea de espacio de ujos,
en la que se entiende a los festivales como mediadores de
redes globales de circulación cinematográca, al que solo
acceden las élites para transferir sus intereses a una gran
red de crculación de la cultura (De Valck, 2007, p. 41).
Normativa de categorización de festivales
de cine.
Jurado (2018) realiza 147 entrevistas a profesionales del
sector cinematográco español, a n de crear cuatro
categorías en las que se exigen diversas condiciones
de calidad para los festivales españoles. Se adoptan 18
condiciones de calidad para analizar la séptima edición
del Kunturñawi. Se trata de establecer en qué medida
cumple con aquellos parámetros, para nalmente ubicar
el festival en la categorización pertinente. Los criterios
son los siguientes:
1.
Un certamen podrá formar parte del listado de
festivales de cine a partir de la celebración de la
quinta edición.
Para Jurado (2018), el hecho de que un festival supere
la quinta edición, asegura una continuidad. Algo con lo
que concuerda Piedad Zurita al armar que han: “tenido
muchas dicultades, sobre todo económicas, pero hemos
logrado continuidad, unas veces anual y otras veces
bianual, dependiendo de muchos factores, sobre todo
económicos” (P. Zurita, comunicación personal, 12 de
enero de 2019). Ahora se encuentran más estructurados,
con una conguración interna que antes no tenían y el
apoyo de muchos programas y proyectos adjuntos que
generan espacios de cinematografía de diversa índole,
como Guaguas al Cine o Eurocine, todos ellos con el
soporte de la Fundación Arte Nativo, que preside Zurita,