Zarays del Valles Cortez Lopez, Daniel Antonio Lahoud Carrero
KAIRÓS, revista de ciencias económicas, juridicas y administrativas, 6(11), pp. 147-167. Segundo Semestre de
2023 (Ecuador). ISSN 2631-2743. DOI: https://doi.org/10.37135/kai.03.11.08
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Se hizo uso de un modelo autorregresivo con rezagos distribuidos que permitió distinguir el
impacto de las variables exógenas, bien sea en el corto plazo o en el largo plazo, en la variable
endógena. Para ello se observó el valor del coeciente que acompaña a la variable independiente,
tomando en cuenta el rezago de esta. Así, el coeciente de una variable explicativa expresada
en T hizo referencia al valor inmediato del impacto provocado sobre la variable endógena,
éste se conoce como multiplicador de corto plazo. Al mismo tiempo si el coeciente de la
variable explicativa está rezagado en un solo período, a saber, t-1, t-2, etc., se le conoce como
multiplicador de mediano plazo. Por otro lado, también se pudo obtener el multiplicador de
largo plazo, éste representa el cambio total o el efecto acumulado de la variable explicada dado
por la suma de todos los coecientes de la variable explicativa.
En consonancia con los resultados esperados, la cartera de créditos rezagada resultó en una
relación negativa con su variable en el período t. La interpretación de este resultado se puede
explicar por el hecho de que los agentes económicos solo pueden solicitar crédito en un período,
entonces si a los consumidores se les otorgó un préstamo en el periodo t-1, en el siguiente
periodo no deberían endeudarse, toda vez que primero deben cancelar la deuda para volver a
solicitar préstamos.
Asimismo, se consideraba una relación negativa entre el coeciente de monetización del crédito
y la cartera de créditos. Los resultados obtenidos señalan una relación inversa entre ellas, lo
cual puede explicarse por el incremento de liquidez monetaria. Si esto sucede, los saldos reales
caen, y por tanto, la inversión no se canalizará hacia el ahorro sino hacia el consumo. La caída
del ahorro provocará una caída en los depósitos bancarios, y por ende, en el volumen de la
cartera de créditos.
De igual manera, se esperaba una relación negativa entre el índice de profundización crediticia
y la cartera de créditos. Con los resultados obtenidos se comprueba dicho planteamiento. Para
que esta relación sea negativa, el cociente entre cartera de crédito y producto interno bruto
debe ser negativo también, esto sucedería en dos escenarios: el primero se corresponde al
caso en el cual el producto interno bruto crece y la cartera de créditos disminuye, es decir, hay
mayor actividad económica y no hay tanta necesidad de nanciamiento. El segundo escenario
ocurriría cuando el producto interno bruto decrece y la cartera de créditos aumenta, es decir, si
por efectos externos ocurre una contracción en la economía y la necesidad de nanciamiento se
incrementa. A lo largo del período de estudio se presentan ambos escenarios.
Por otra parte, se esperaba que la ratio posición de encaje legal y cartera de créditos obtuviese
signo negativo. Una vez realizada las regresiones se comprueba dicho signo esperado, esta
relación negativa se debería a la ya existente relación negativa entre la cartera de crédito y el
encaje legal, como ya fue explicado. El encaje es un instrumento que permite al Banco Central